LOS BARES Y RESTAURANTES HAN VIVIDO GRANDES HISTORIAS DE NUESTRO PAÍS. ÚNETE A #SOYPATRIMONIO2020

Durante el confinamiento, hemos echado de menos muchas cosas como poder juntarnos con familia y amigos. Y nos hemos dado cuenta de que muchos de estos encuentros han tenido como escenario de excepción los locales hosteleros, que ya podemos volver a visitar, siempre contando con las medidas adecuadas de seguridad.

Si echamos la vista atrás, ¿quién no ha sentido un flechazo en un bar? ¿Cuántos partidos hemos visto apoyando a nuestros equipos? ¿Cuántas veces hemos “arreglado el mundo” sentados en torno a una mesa? Las barras de los locales, sus butacas, sus terrazas, sus pistas de baile y reservados han visto tantas cosas que con sus anécdotas podríamos reescribir la historia de nuestro país.

¡Existen miles de curiosidades vividas en estos establecimientos tan nuestros! Por ejemplo, cuenta la leyenda que los puntos más conflictivos de la Constitución de 1978 se consensuaron de forma más coloquial en los salones de un bar cercano al Congreso de los Diputados de Madrid. Esto demuestra que todo puede hablarse en un bar, acercando posturas hasta en los temas más controvertidos y relevantes.

Los locales han sido también el estudio, incluso la inspiración, de muchos de los grandes nombres del mundo de la literatura, el arte, el cine o la fotografía. Ernest Hemingway culminó en un famoso restaurante de Madrid, el más antiguo del mundo según el Libro Guinness de los Récords (¡sí, está oficialmente en España!), dos de sus novelas más famosas: “Muerte en la tarde” y “Fiesta”. ¡Y es que algunas obras de Lorca, Valle-Inclán, Machado o el propio Hemingway no serían las mismas sin los bares donde las escribieron bebiendo de las historias que se sucedían ante sus ojos! ¿Sabías que el mismísimo Andy Warhol no perdía la oportunidad de disfrutar de una especialidad tan nuestra como las gambas, acodado en la barra de un bar mítico de la capital, cada vez que visitaba nuestro país? Picasso, Dalí y otros genios de la pintura también eran contertulios habituales de locales, en este caso, de la Ciudad Condal, llegando a diseñar incluso el menú de alguno de los establecimientos foco de cultura de su época.

Y, por supuesto, la música siempre ha estado ligada a bares y restaurantes. Sin ellos, movimientos como la Movida Madrileña – La Movida, tras su extensión a otras provincias – no habrían existido como los conocemos. Este movimiento brilló con toda su fuerza durante los años 8o, tras combinarse inspiración, ritmo, baile e ideas de libertad en diferentes locales de referencia haciendo de Malasaña el barrio donde la creatividad encumbró a grupos cuyos hits, auténticos himnos para esa generación y las venideras, aún cantamos en nuestros días. En toda nuestra geografía, los bares y salas españolas han acogido la eclosión de grupos musicales llamados al estrellato.

Tampoco podemos olvidar la parte gastronómica, tan importante, ya que los establecimientos hosteleros son auténticos laboratorios donde se mezcla la tradición con la vanguardia para seguir presentando los alimentos y bebidas más irresistibles. Algunos de los pinchos y aperitivos más queridos y reconocibles en todo el país han visto la luz en un bar, como las famosas “gildas” o banderillas que surgieron en San Sebastián de la combinación de encurtidos tan tradicionales como las aceitunas, las anchoas y las guindillas en un solo bocado, ejemplificando que el resultado es mucho más que la suma de las partes. Y es que la innovación puede partir de algo en apariencia sencillo y encontrarse en cualquier barra o sala. ¡Cuántos bares han creado su propio montadito, su “guiso de la abuela” único, su cóctel perfecto para una tarde de domingo! La gastronomía española es parte de nuestro patrimonio desde hace siglos.

Ejemplos como estos nos demuestran que muchas cosas importantes de nuestras vidas, y de las de los que nos rodean, pivotan en torno a los locales hosteleros. En ellos hacemos trabajos de universidad, celebramos cumpleaños, tenemos citas… ¡Y son parte de nuestra historia! Han vivido el cambio de los platos más contundentes a las tapas más delicadas; han adoptado el concepto de menú como lo conocemos hoy en día, con dos platos y postre; han sido cómplices de múltiples intrigas de espionaje; han seguido abiertos para nosotros incluso de forma clandestina en períodos de restricciones y han sido nuestro refugio en los momentos más difíciles. Ahora, son estos locales los que están viviendo una época complicada impuesta por la crisis de la COVID-19, ¡este es el momento de devolverles el favor y demostrar que también estamos aquí para ellos!

La iniciativa #SoyPatrimonio2020, impulsada por HOSTELERÍA DE ESPAÑA, AECOC y FIAB junto al movimiento #JuntosconlaHostelería, busca atraer público a los locales para que podamos seguir disfrutando de historias memorables. Para ello, se necesitan todas las firmas que se puedan conseguir para solicitar a la UNESCO que declare a bares y restaurantes Patrimonio de la Humanidad 2020, dando testimonio de que son el mayor (¡y mejor!) espacio de ocio y socialización además de parte de la historia viva de nuestro país. Como indicó Emilio Gallego, Secretario General de Confederación Empresarial de Hostelería de España, durante la última sesión de charlas de expertos de #JuntosconlaHostelería de la plataforma Bartalent Lab sobre la recuperación del sector, con #SoyPatrimonio2020 se recalca que la hostelería es una forma de vida para los españoles. “Cualquier celebración pasa en nuestro país por un establecimiento hostelero; la hostelería en España es la red social más importante… no solo hablamos de una actividad económica, sino de nuestra forma de ser, de relacionarnos, de divertirnos y de vivir nuestro tiempo libre. Los turistas también lo saben: reconocen nuestra manera de vivir, nuestro acervo cultural, en estos establecimientos”, indicó Emilio para recalcar la importancia de ayudar a la recuperación de la hostelería. Y tú, ¿te sumas a la causa? ¡Ayúdanos a reconocer la importancia cultural e histórica de los locales de hostelería y restauración de nuestro país!

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